Director comercial: 10 maneras de sorprender en tu reunion de ventas

Hoy amig@ Director/a Comercial te voy a contar algunas maneras de hacer tu reunión de ventas de seguimiento semanal un poco más… inesperadas, podríamos decir.

A veces las reuniones de ventas semanales se convierten en algo rutinario. Todo el mundo sabe ya lo que va a suceder: cada uno va a exponer su trabajo realizado durante la semana, las expectativas, vamos a poner en común problemas, contratiempos y también éxitos conseguidos…

Así cada lunes… (o viernes a última hora) pfff… siempre igual. No estaría mal tirar de imaginación e ir incorporando a nuestras reuniones elementos que las hicieran más inesperadas, únicas, divertidas, motivadoras, formadoras… Así que aquí te dejo

10 maneras de sorprender, impactar y tener a tu equipo de ventas con esa sensación de «¿y qué nos tendrá preparado hoy»?

Vamos con ellas:

1. El speaker invitado: invita a alguien para que dé 15, 30, 45 minutos de charla. Aquí tienes algunas posibilidades:
   • El jefe, el director de marketing… seguro que tienen un mensaje inspirador que dar tus colaboradores. Estos son los que mejor conocen la empresa por dentro y por supuesto, podemos aprender de ellos.
   • El entrenador de un equipo de fútbol, balonmano… local. Ellos tienen historias de éxito y de fracaso son una buena manera de inspirarnos y de enseñarnos que no siempre se gana, pero con constancia siempre hay éxito.
   • Un profesor, un empresario, alguien de éxito que ayude al equipo a ponerse las pilas.
2. Usa el vídeo: busca en youtube un vídeo de ventas con material fácilmente entendible y aplicable en tu negocio. Aquí tienes unos cuantos. Busca material que hable de ventas, motivación, negocios, casos de éxito…
3. Dile a cada miembro de tu equipo que traigan un artículo, audio, vídeo que transmita un mensaje de valor para el equipo.
4. ¿Por qué hacer todas las reuniones en el despacho de la mesa ovalada?
   • Pregunta a algún proveedor o cliente si te deja su sala de reuniones
   • Haz la reunión en aula de la universidad, la asociación de empresarios, el colegio de ingenieros…
5. Conduce una mastermind. ¿Y qué leches es una mastermind?: dile a la gente de tu equipo que vengan con un problema, dificultad que tienen en su día a día. Cada uno expone su problema para lo que quiere encontrar solución y el resto del equipo a modo tormenta de ideas le darán recomendaciones. La persona debe comprometerse a poner algo en práctica antes de la siguiente reunión.
6. Inicia un debate. Haz dos equipos y propón una temática. Diles que traigan para la reunión de la semana siguiente los pros y los contras de lo que planteas. Esto fomenta la preparación, la escucha y el pensamiento empático, el ponerse en los zapatos del otro. Ejemplo de debate: «¿Deberíamos bajar el precio que pagan nuestros clientes?».
7. Un buen entrenamiento en una reunión de ventas es poder practicar con situaciones que nuestros vendedores pueden encontrar en su día a día:
   • Practicar una situación que habitualmente se da con algún cliente (presentación de producto, objeciones…)
   • Grabar el role playing, la situación escenificada por los dos vendedores
   • Visualizar el vídeo y pregúntale qué tres cosas le ha gustado de su actuación y qué desearía mejorar
   • Invita a otros vendedores a participar y a decir qué tres cosas los protagonistas del vídeo hicieron bien y qué única cosa creen que deben mejorar
8. Una buena forma de hacer tu reunión de ventas diferente es decirle a cada miembro del equipo que lean un libro o una parte de un libro (un capítulo, una pasaje…). Pregúntales luego qué dos o tres cosas de las que han leído se pueden aplicar desde ya a nuestra actividad de ventas diaria.
9. Haz una sesión de storytelling: invita a un miembro de tu equipo de ventas que cuente al detalle una historia de éxito, desde el momento en que no conseguía dar con el posible cliente hasta que hizo algo que le dio la vuelta a la tortilla.
10. Reúnete por herramientas web como Google Hangout o GotoWebinar

Ahora tienes 10 maneras para romper la previsibilidad de tus reuniones. ¡Está bien! Léelas de nuevo y pregúntate ¿qué pequeño cambio puedo hacer en la próxima reunión?. Es una manera de romper la monotonía, de hacer que los integrantes de tu equipo estén esperando la reunión pero sobre todo es una manera de convertir las reuniones en pequeños mini entrenamientos que potencian las habilidades, capacidades y el buen clima laboral.

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